Resistencia a la Corrosión

¿Qué es la resistencia a la corrosión?

La corrosión es un fenómeno natural que ocurre en muchos materiales. Puede presentarse de diversas formas, como erosión, picaduras y cavitación, entre otras. La forma más conocida es la oxidación. En la industria, la corrosión causa cada año inmensos perjuicios económicos. Los expertos calculan que el coste anual que supone la corrosión en los países industrializados asciende hasta el 5 % del PIB.

Para muchas empresas, el uso de aleaciones resistentes a la corrosión es, por lo tanto, fundamental para ahorrar dinero… y tiempo. Esto se debe a que la resistencia a la corrosión de un material influye en la frecuencia con la que debe realizarse el mantenimiento de una pieza. La resistencia a la corrosión se define como la capacidad de soportar el deterioro y la descomposición química que se producirían cuando un material o una pieza se exponen a su entorno.

¿Qué es la corrosión?

La corrosión es una reacción química que provoca graves daños en los metales e incluso destruye su funcionalidad. Durante la reacción, el metal afectado libera un electrón, lo cual provoca un cambio en el material. Este cambio puede ser visual, como por ejemplo la decoloración del metal. La mayoría de las veces, y este es el verdadero problema, también se produce un cambio físico. Por ejemplo, se producen deformidades y pérdida de peso. Estos cambios pueden ocasionar averías operativas.

Aunque la corrosión es un fenómeno omnipresente, determinados entornos y condiciones aceleran el proceso. Por ejemplo, la sal o los ácidos aumentan considerablemente el proceso de corrosión, razón por la cual las aleaciones resistentes a la corrosión son especialmente importantes para determinadas industrias, como la marítima, ya que el agua de mar es un acelerador de la corrosión. Aunque todos los materiales son propensos a la corrosión, algunos lo son menos.

Cómo protegerse de la corrosión

La resistencia a la corrosión se define como la capacidad del material de soportar daños por corrosión. Por lo general, hay dos formas diferentes de proteger un metal de la corrosión. La protección activa contra la corrosión es una medida a largo plazo. Consiste en añadir un inhibidor al metal, que reduce la agresividad de los electrolitos. O se aplica el llamado ánodo de sacrificio, que impide la formación de iones de hierro positivos. Si desea saber más sobre la protección contra la corrosión, le sugerimos que descargue nuestro documento técnico gratuito acerca de la resistencia a la corrosión.

¿Qué es una aleación resistente a la corrosión?

Una aleación resistente a la corrosión es un tipo de metal o aleación diseñado para resistir la corrosión o la degradación causada por la exposición a diversos entornos corrosivos, como altas temperaturas, humedad, exposición química y otros factores ambientales. Las aleaciones resistentes a la corrosión se emplean en una gran variedad de sectores, entre los que se incluyen la construcción, la industria aeroespacial, la automoción, los procesos industriales y la siderurgia. Elegir la aleación resistente a la corrosión adecuada dependerá de cada caso de aplicación, del entorno corrosivo y de las propiedades requeridas, tales como resistencia, durabilidad y conductividad.

AMPCO METAL es consciente de los exigentes requisitos que deben cumplir los materiales de la industria. Para satisfacer estas elevadas exigencias en los materiales, hemos desarrollado varios bronces al aluminio para cumplir y superar cada requisito. Nuestros bronces al aluminio son famosos por su gran solidez y su excepcional resistencia a la corrosión. Esta resistencia es similar a la del acero de medio carbono y a la excepcional resistencia de la aleación.